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Cómo dejar atrás la búsqueda de la perfección.

18/10/2020

La sociedad actual nos impulsa a menudo a una búsqueda obsesiva y enfermiza de la perfección. No basta con hacerlo bien, sino que hay que ir más allá, y esto a menudo significa que no hay límite, que no hay un punto donde encontró que todo ya es perfecto, siempre se podrá mejorar. La búsqueda de la perfección es algo válido, no es en sí mismo un problema. Esta muy bien querer hacer las cosas lo mejor posible, pero nada más. El problema es cuando caemos en esta investigación obsesiva, en el mínimo detalle, en buscar una perfección imposible que nos llevará a una enorme frustración. Cuando trabajamos en conseguir algo, al hacerlo lo mejor posible, estamos centrados encima de lo que estamos haciendo, y lo disfrutamos de alguna manera. Cuando entramos en la búsqueda de la perfección perdemos de vista el hecho en sí, y ahora sólo importan los detalles, sin ver el conjunto, sin ser conscientes ni que, ni para que lo hacíamos.

El perfeccionismo paralizante


Posiblemente alguna vez te has encontrado pensando:
"Quisiera hacer X pero no tengo suficiente preparación, no tengo suficientes conocimientos, habría que hacer más, no
consigo que sea suficientemente perfecto "
Podemos sustituir la X por una infinidad de cosas:
Hacer un informe o proyecto
Desarrollar un hobbie
-Tomar una decisión importante
Planificar un viaje soñado
-Escribir un libro
Esta lista podría ser infinitamente larga, y perfecta, pero entonces no acabaría nunca de
escribir este artículo.
Quizás estar buscando esa perfección imposible. Lo que normalmente sucederá con ello, se
que deberás dedicado tanto tiempo en la preparación que nunca llegarás a hacerlo realidad, porque
cada vez que quieras iniciarlo encontrarás una nueva razón para esperar a mejorar.
Y eso nos afectará tanto en el ámbito de trabajo, ya que no hay manera de que acabamos con la
tarea encomendada, como en el ámbito privado donde esta falta de resolución nos puede llevar a problemas
de autoestima.


El perfeccionismo en la vida privada


En la vida privada un ejemplo muy claro es nuestra imagen o nuestro físico, donde podemos llegar a
motivar conductas enfermizas y trastornos psicológicos graves con la alimentación, como la anorexia,
bulimia o atracones, o con el ejercicio físico, como la vigorexia.
Es necesario que te preguntes si lo que quieres es una buena vida, o por el contrario es necesario que tu vida
sea ​​completamente perfecto, y si estás en este segundo punto tienes un problema. Somos humanos y
vivimos en la tierra, y este lugar no es precisamente perfecto, ni hay nada que sea imperfecto
totalmente, sino que todo es como debe ser, ni más ni menos.
Lo que no quiero decir es, que como todo es como debe ser, lo dejes correr y no intentes mejorar
nada, sino que midas en qué medida se puede mejorar. Tienes que ser la mejor versión de ti, que
hagas lo mejor que puedes hacer, pero sin olvidar los límites que tienes, y lo que puedes y lo que no puedes
hacer, valorando donde están tus potenciales y al mismo tiempo sabiendo donde están aquellas cosas que nunca serás
capaz de hacer. Quizás tu complexión es fuerte, y no podrás ser una persona muy delgada, o quizás no sabrás jugar al
fútbol, ​​pero quizás podrás ser un gran amigo, o una persona emprendedora, o tendrás diferentes cosas buenas pero
ninguna de muy destacable.

No marqués aquel lugar donde quieres llegar y que es imposible de alcanzar, y por el contrario ve a buscar
lo que te gusta, lo que te impulsa, y habrás hecho muchas cosas importantes para ti, aunque
no sean perfectas, ni lo mejor para el resto del mundo.


Evitamos la frustración.


En la búsqueda de la perfección encontraremos la frustración.
La persona perfeccionista cree que es posible de llegar a este nivel de perfección, sin
darse cuenta de que esto es un mito. Se centra en sus errores o en los puntos de mejora, y
mientras comete un gran error, porque no goza de lo que ha hecho, creando un nuevo error
solucionar, su propia y enorme frustración.
Si tu caso es que eres esa persona, te recomiendo que imprimas esta frase y la
cuelgues donde la puedas leer cada mañana.
"Nada es perfecto"
Y como no se perfecto significa que siempre podemos mejorar, pero a la vez ser consciente de que no
hay un límite donde llegar, y que por tanto como se dice en el poema del viaje a Itaca de Kavafis
"Ten siempre en el corazón la idea de Itaca.
Tienes que llegar, es tu destino,
pero no fuerces nada la travesía.
Es preferible que dure muchos años,
que seas viejo cuando fondees la isla,
rico de cuanto habrás ganado en el camino,
sin esperar a que dé más riquezas. "
Porque finalmente lo importante no es llegar, sino que es en el camino en el que vivimos. No se trata de
llegar a la perfección, sino de aprender, de evolucionar y de mejorar cada día y en cada paso.


Consejos para dejar atrás la perfección


-Ajustar tu nivel de exigencia
En cada momento, a cada paso, piensa que es lo que realmente importa.
Si estamos haciendo un pastel con nuestros hijos pequeños, el menos importante de todo es el bonito que
esta o no quedando el pastel. De hecho incluso me atrevo a decir que los menos importante se si
conseguimos algo comestible. Lo más importante en este proceso será lo que me
compartido o que hemos vivido, las risas, las bromas, y la complicidad entre el grupo.
Y lo mismo pasa en el trabajo, porque no siempre conseguimos un nivel de éxito que podamos
pensar que es el suficiente para aquella tarea o aquel informe. Pero el hecho finalmente no se que
sea ​​el mejor informe del mundo, o la tarea más perfecto, sino que tenemos que valorar que esté
terminada en el tiempo y la forma que nos han dado para hacerla, y que el resultado responda a las
necesidades de momento.
Este artículo por ejemplo podría ser mejor, seguro, y podría llevar mil enlaces a recursos
de todo tipo, e incluso poner más ejemplos, pero quizás no se necesitan, pues estoy escribiendo un
artículo y no una tesis doctoral sobre el tema, con toda una investigación detrás. este
escrito debe resolver el tema del título, y aportar una información válida, que siempre podrá ser
mejor o ampliable, pero no es o que nos piden.

-Disfrutar de lo que haces.
La obsesión nos lleva a no disfrutar, a enfadarnos, a volvernos críticos con todo y con todos y en
alejarnos de las personas que nos rodean.
No estamos en el momento, sino que estamos viviendo en esta permanente ansiedad de conseguir
llegar en una fecha, de conseguir una habilidad que no tenemos o de un resultado final. Y como
todo al mismo tiempo no se puede conseguir, el resultado acaba siendo muchas veces la frustración y el bloqueo.
Cada vez que tenemos un error, hemos dado un paso adelante para mejorar, y eso es lo más importante
a tener en cuenta. No dejar nunca de aprender y valorar todo lo que sabemos.


-Avanzar significa cometer errores.
Todo lo que haces tiene errores, todo lo que aprendes se incumplido, siempre hay más y más por hacer, pero
hay que tener claro que no hay un final, sino como he dicho antes hay un camino.
No se trató de llegar, sino de ver cada momento, cada error, y extraer algo que
te lleve al siguiente nivel, porque aunque no lo parezco te ha llevado un poco más arriba.
Todo esta por hacer.
Cómo hacer todo esto? Pues a tu manera, para que finalmente no hay otra manera de hacerlo que
no sea esta, tu imperfecta vía. Nunca será un camino perfecto para todos, para que no
soluciones únicas personas diferentes, pero si será perfecto para ti, y esto se finalmente
lo único que te ha de importar.
Si tu camino te lleva a la felicidad, es que es un camino correcto.